Se ha practicado un experimento en alimentación en aves para probar el valor nutritivo y la toxicidad de la harina de caparazón de langostinos. De los análisis practicados se desprende que la harina de caparazón de langostinos es fuente de vitamina A y rica en substancias minerales. PodrÃa asi compensar a la harina de pescado, carente de vitamina A y con menores cantidades de minerales. El retraso en el desarrollo de aves alimentadas con más de 6% de harina de caparazón de langostinos inducen a afirmar que está lejos de alcanzar el valor nutritivo de la harina de pescado. Es evidente que los experimentos pudieron haberse desviado hacia otros campos, pero se prefirió concretar la finalidad del experimento a una meta, cual fue ver si en realidad constituÃa o no un alimento eficaz en las raciones para aves, especialmente con los antecedentes de que habÃa producido transtornos digestivos graves, que culminaban casi siempre con la muerte. Queda aún por apreciarse sus efectos en aves de postura, lo que será materia de un nuevo experimento. |